Cuando abrí la tienda,en 1994 lo hice dentro de un proyecto de "Comercio justo" :La cooperativa Alternativa 3. 

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Tenía claro que era posible un comercio alternativo, una economía ética, y con esa esperanza,

 me sumé a traer artesanía y alimentación de países que aquí llamaban "En vías de desarrollo".

Quería  apoyarlos a través de  sus producciones y creaciones  pagando un precio justo por ellas,

en una relación lógica de precio final entre el productor y el consumidor último.

 

También era parte del proyecto, la información de los países de origen, las cooperativas de

producción y los proyectos sociales que se apoyaban con la compra de sus productos, como una manera de acercar la realidad de esos países, de sus gentes, a esta parte privilegiada del mundo.

Conocer la trazabilidad de los productos que ofrecíamos.

Pero, casi treinta años después y siguiendo con el mismo criterio de comercio sostenible y ético, le doy  mucha más  importancia a lo que es sostenible en costos ambientales: transporte, gastos energéticos, reciclaje, residuos y costes sociales.

 

Por eso la tienda ha girado, hacia el comercio de proximidad, lo que

está más cerca, la  ropa hecha en el país, los  artesanxs locales, el reciclaje, la  re-utilización.

La necesidades del planeta de hoy, son tan  urgentes y criticas que necesitamos crear red con lxs que tenemos cerca y apoyarnos unxs a otrxs, reduciendo todo lo posible los costes ambientales y analizando bien que apoyar y porqué, valorando la huella ecológica que deja cada uno de nuestras decisiones comerciales.

 

Necesitamos construir y apostar por las soluciones a los problemas que nos enfrentamos.

Siguiendo ese criterio y a través de su practica hemos tomado decisiones día a día que han configurado una especie de carta de principios con la que trabajamos.